España comienza siglos

Madrid (AFP) – Las coloridas celebraciones de la Semana Santa en España comienzan el domingo, con procesiones centenarias de fieles portando carrozas cubiertas de flores y coronadas con estatuas de Cristo o la Virgen María que atraen a grandes multitudes.

Emitido el: 04/02/2023 - 12:32Modificado: 04/02/2023 - 14:11

Organizados por varias hermandades religiosas, los desfiles se celebran en todo el país en la semana previa al Domingo de Pascua, que este año en la Iglesia cristiana cae el 9 de abril.

Las carrozas, que representan escenas de la historia de la Pasión de Cristo, son llevadas a hombros por miembros de las hermandades llamadas "costaleros", a menudo acompañadas de música solemne de una banda de música.

Otros miembros de las cofradías acompañan a las carrozas ataviados con largas túnicas con capuchas altas y puntiagudas que sólo dejan dos pequeños agujeros para los ojos.

Las procesiones aparecieron por primera vez en los siglos XV y XVI en España, que ya contaba con una tradición de teatro bíblico que representaba la Pasión.

"Al principio la gente salía a la calle con una cruz", explica a la AFP Fermín Labarga, profesor de Historia de la Iglesia en la Universidad de Navarra.

Estaban acompañados por otros miembros de cofradías religiosas que "realizaron actos de penitencia", como azotes en la espalda desnuda, añadió.

Estas autoflagelaciones desaparecieron en el siglo XVIII debido a las crecientes críticas de que "no se hacían por devoción sino por ostentación", afirmó Labarga.

Pero la tradición de realizar procesiones de Semana Santa continuó.

El objetivo de los desfiles era "recordar la Pasión (de Cristo)" -la semana de la crucifixión y resurrección de Jesús- y "fortalecer la fe", dijo Labarga.

Si bien España, como la mayoría de las naciones europeas, se ha vuelto cada vez más secular en las últimas décadas, los desfiles continúan atrayendo grandes multitudes de todos los niveles de devoción y todos los ámbitos de la vida.

Muchas de las procesiones más famosas se retransmiten en directo por televisión.

Labarga las calificó de "actuación completa".

A los españoles les encantan las procesiones "porque son estéticamente bonitas e incorporan elementos festivos que las hacen muy atractivas, con música, imágenes y movimiento", añadió.

Los desfiles más elaborados y extravagantes se llevan a cabo en la región sur de Andalucía, particularmente en su capital, Sevilla, y en la ciudad norteña de Valladolid.

La Procesión de la Pasión que se celebra en Valladolid el Viernes Santo cuenta con más de 1.000 participantes y decenas de carrozas.

Normalmente, las procesiones más dramáticas y fervientes tienen lugar el Jueves Santo y el Viernes Santo, cuando los dolientes vestidos con encaje negro suelen unirse para conmemorar la muerte de Cristo.

El Domingo de Resurrección, cuando se celebra la milagrosa resurrección de Cristo, los desfiles se vuelven más jubilosos y con música más animada.

Durante los siglos XVI y XVII, España exportó su tradición del desfile de Semana Santa a sus posesiones de ultramar, principalmente en América Latina.

Las procesiones son especialmente populares en Guatemala, México, Perú y Venezuela.

La Semana Santa de Guatemala, una vibrante celebración que mezcla rituales mayas con fervor religioso católico, recibió el año pasado el estatus de patrimonio de la UNESCO.

España también introdujo estas procesiones en las partes del sur de Italia que gobernó hasta el siglo XVIII.

El legado también se puede encontrar en Filipinas, que España gobernó hasta 1898.

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